Llega el otoño y con él, los días lluviosos, la bajada de las temperaturas, las tardes de sofá y manta… lo que significa también que comienza la cuenta atrás para poner la calefacción y hacer un mayor uso del gas en casa. En TotalEnergies te ayudamos con diferentes tarifas para que puedas escoger aquella que sea perfecta para ti.
Y si, además, quieres ahorrar en la factura del gas no te pierdas este post donde verás que solo con unos hábitos muy sencillos, y sin ningún tipo de inversión extra, conseguirás reducir el consumo de energía manteniendo el máximo confort en tu hogar.
¿Qué es lo que más gas gasta en una casa?
El gas natural es una de las fuentes de combustible que más utilizamos en nuestra casa, ya que es necesario para tener calefacción y agua caliente en nuestro hogar, de forma eficiente y segura. Además, permite que muchos electrodomésticos y aparatos que se usan diariamente funcionen, ya que no requieren electricidad, como es el caso de algunas estufas, radiadores, hornos de gas, secadoras, calentadores de agua, chimeneas, lavavajillas, etc.
Pero ¿qué es lo que más gas consume en una casa?
La calefacción es el elemento que más gasto de gas natural conlleva en una vivienda en España, ya sea a través de una caldera convencional o de condensación. Siendo mayor la incidencia en los pisos frente a las viviendas unifamiliares, aunque su consumo también dependerá de la zona geográfica donde se ubique.
El agua caliente también implica un importante consumo y gasto de gas natural, a través de calderas colectivas o individuales. Igualmente, en este segundo caso la incidencia es mucho mayor en pisos que en viviendas unifamiliares.
También, debemos tener en cuenta las cocinas que aún funcionan con gas natural, aunque cada vez hay menos debido al aumento en popularidad de las cocinas eléctricas.
Además, existen otros aspectos que influyen en el consumo de gas en una vivienda como son las características de la casa o el número de personas que viven en ella. Incluso, la orientación y la situación geográfica de una casa será clave en el consumo de gas debido a la climatología ya que, en zonas con un clima más frío y húmedo, será superior.
Consejos para reducir el consumo de gas
Como la calefacción es la principal fuente de gasto de gas natural en una casa, la reducción de su uso será lo que logre mayor impacto en el ahorro. A continuación, vemos una serie de recomendaciones, de cara a optimizar su uso y obtener los mejores resultados con el consumo mínimo.
Aprovecha la luz del sol:
El Sol es la mayor fuente natural de calor que tenemos. Por eso, aprovéchalo y sube las persianas durante el día para dejar que el sol caliente tu hogar. Esto te permitirá mantener una temperatura ambiente que ayudará a que la caldera no esté funcionando todo el día. Para ello, es importante que revises todas las puertas y ventanas para comprobar que no haya fisuras por donde pueda entrar el frío o escaparse el calor de tu casa.
Además, ventila tu casa en las horas del día cercanas al mediodía, cuando se haya ido la humedad y el frío de la madrugada. Piensa que si aprovechas al máximo las horas de luz solar durante el día puedes conseguir que tu factura de gas sea más económica.
Ajustar la temperatura de la calefacción y del calentador:
Según las recomendaciones e indicaciones de la IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía), la temperatura de 19ºC, con ropa adecuada, sería suficiente para mantener el confort en tu casa. Se estima que por cada grado que subimos la temperatura, se incrementa en un 7% el consumo de energía y por tanto la factura energética.
La colocación de los radiadores también es clave para el ahorro energético, lo ideal es que estén situados debajo de las ventanas para conseguir una mejor distribución del aire y del calor por toda la estancia. Además, procura no tapar los radiadores ni con cortinas ni con muebles para que la salida del calor sea más directa y conseguir así un uso más eficiente y económico.
Los emisores térmicos pueden ser también una buena opción si estás pensando en instalar un sistema de calefacción eficiente con el que ahorrar en el consumo energético de tu hogar.
Usa termostatos inteligentes:
Instalar un termostato inteligente puede ser una buena inversión ya que no solo te permite regular la temperatura del ambiente sino también puedes programar para que se enciendan y apaguen a determinada horas.
Los hay incluso que están equipados con Wifi, por lo que se pueden controlar a través del móvil desde cualquier sitio. Así, es posible encender la calefacción solo un rato antes de llegar a casa, para no gastar de más, o por el contrario apagarla si por algún motivo vas a llegar más tarde.
Otra medida de ahorro consiste en instalar válvulas termostáticas en tus radiadores ya que es capaz de regular la temperatura en función de la que exista en la estancia.
Correcto mantenimiento de los radiadores y las calderas:
Un mantenimiento adecuado es básico para evitar un consumo desmesurado provocado por un mal estado de los radiadores o la caldera. Hay cuidados básicos que te ayudarán de forma notoria a reducir tu consumo de gas y el gasto que generan.
Tareas tales como: revisar el equipo en busca de posibles pérdidas de agua, purgar los circuitos para eliminar la presencia de aire en su interior, controlar la presión del agua y verificar que las juntas de los tapones estén secas y si no lo están, cambiarlas.
Y, además, es recomendable contratar servicios de mantenimiento periódicos para ahorrarte sorpresas y tener todo bajo control.
Ahorra agua caliente:
Un truco es colocar los grifos en posición de agua fría ya que en muchas ocasiones no necesitamos agua caliente, pero al tener colocado el grifo en esa posición, se enciende el calentador automáticamente cada vez que lo abrimos y esto genera un consumo de gas innecesario. Cuando necesites agua caliente, gira el grifo de posición y así pagarás solo cuando lo necesites de verdad.
Igualmente, te recomendamos que sustituyas los baños por duchas cortas y cierres el grifo mientras te lavas los dientes, lavas los platos a mano o te enjabonas en la ducha. Y a la hora de usar la lavadora, elige programas de agua fría ya que solo es necesario usar el agua caliente cuando la ropa está demasiado sucia.
También es importante que nos fijemos en la temperatura del calentador. Se recomienda fijarla a un máximo de 45 ºC, y que la temperatura del agua no supere los 30-35º, porque lo más habitual es que nunca llegues a utilizar temperaturas tan altas.
Trucos en la cocina:
Si tu cocina es de gas, también hay algunos pequeños trucos para ahorrar como tapar las ollas cuando estés cocinando para reducir el tiempo de cocción y apaga el fuego minutos antes de terminar el cocinado para aprovechar el calor residual.
Otra medida útil a la hora de cocinar es regular la llama de los quemadores en función del tamaño de la olla o sartén que se coloque encima ya que el fuego que sobresale supone un gasto inútil.
Por último, se recomienda el uso del microondas antes que el horno: además de ganar tiempo, el gasto es inferior. Y si enciendes el horno, evita abrirlo durante la cocción para que no se pierda el calor y trata de apagarlo un poco antes de terminar de cocinar para también aprovechar el calor.
Ya has visto que puedes ahorrar en el consumo de gas de una manera sencilla siguiendo una serie de recomendaciones, pero si quieres que tu ahorro sea todavía mayor, y buscas hacer un uso eficiente y limpio de la energía, en TotalEnergies te ofrecemos las mejores tarifas de luz y gas. Además, gracias a nuestra amplia experiencia y a nuestro equipo experto, todo te resultará fácil y sencillo. ¿A qué esperas?