¿Para qué sirve el maxímetro en un negocio?

¿Sabes en qué consisten los maxímetros, y las ventajas que puede tener para la eficiencia energética de tu negocio contar con uno? Si buscas optimizar el gasto de luz de tu empresa, ¡sigue leyendo!

¿Qué es un maxímetro y cómo funciona?

Un maxímetro es un dispositivo que registra la máxima potencia que necesita un punto de suministro concreto para facturar. Del mismo modo, hace que el suministro energético no se interrumpa en ningún momento, aunque se supere la potencia que se encuentra contratada. Se usa en las instalaciones con una potencia estipulada mayor a los 15 kW, situación habitual en negocios y empresas. 

 

Potencia máxima demandada

La potencia máxima demandada es la suma de las potencias de los diferentes aparatos que están conectados al mismo tiempo en un momento concreto. Es decir, este resultado cambia en función del tipo y de la cantidad de dispositivos que se estén usando simultáneamente. 

 

¿En qué afecta tener un maxímetro a mi empresa? 

Como ya te comentamos, lo primero en lo que te afectará contar con un maxímetro en tu empresa es el hecho de que, aunque se supere la máxima potencia contratada, nunca te quedarás sin suministro eléctrico.

En este sentido, el dispositivo se encarga de registrar estos picos de demanda o máximos de potencia, de igual modo que la potencia que necesita tu instalación. Así, puedes consultar estos datos para aumentar la potencia de tu tarifa en caso de que sea necesario. Del mismo modo, también podrás comprobar si puedes disminuirla, en el caso de que la potencia que demande tu instalación se encuentre bastante por debajo de lo que has contratado en un primer momento. 
Es decir, a fin de cuentas, el maxímetro te ayudará a optimizar la potencia eléctrica de tu negocio, pudiendo saber de manera concreta cuánta es la justa y la necesaria en cada caso. 

 

¿Pago más en mi factura por tener un maxímetro?

Al igual que ocurre con los contadores comunes, en la gran mayoría de veces que se cuenta con un maxímetro este es alquilado a la compañía eléctrica. O lo que es lo mismo, la distribuidora te cobra el alquiler del mismo en cada factura que recibas, bajo la denominación “alquiler del equipo de medida”.  

 

¿En qué negocios es vital contar con un maxímetro? 

En general, se hace indispensable contar con maxímetros en todos aquellos negocios que no se puedan permitir cortes de suministro de electricidad, ya que estos darían lugar a parones en la productividad y/o interrumpirían gravemente la actividad o actividades desarrolladas, pudiendo incluso llegar a poner en peligro vidas humanas.

 

Por ejemplo: restaurantes, centros comerciales, supermercados, negocios alimenticios, talleres que necesiten una ventilación constante, hospitales y centros de salud, o empresas con cadenas ininterrumpidas de trabajo, entre muchos otros. 

 

¿Dónde se instala?

Los maxímetros se instalan al lado de los contadores de la luz, ya que lo más habitual es que permitan observar los resultados registrados en el mismo dispositivo. 

 

¿Y si convivo con otros negocios en el mismo edificio?

Lo primero que hay que tener en cuenta es que en este caso existen dos posibles situaciones: que los servicios estén compartidos y por lo tanto se disponga de un contador común, repartiéndose a partes igual el gasto del mismo, o bien que estén independizados y cada empresa disponga de su propio contador individual. 
En el primero de los casos, el maxímetro, como es lógico, iría asociado al contador común del edificio. La principal desventaja de esto es que nunca podrías saber cuánta energía necesita de manera concreta tu negocio. 

De otra forma, si cada empresa tiene los servicios individualizados y su contador propio, cada negocio tendrá un maxímetro diferente vinculado. Esta es la opción más recomendada, ya puedes saber a ciencia cierta la energía necesaria específica de tus instalaciones. 

 

Diferencia entre el maxímetro y el Interruptor de Control de Potencia (ICP)

Los Interruptores de Control de Potencia o ICP y los maxímetros cuentan con diferencias sustanciales: 

 

• En primer lugar, como ya mencionamos al principio de este artículo, los maxímetros se instalan cuando la potencia contratada supera los 15 kW, mientras que los ICP son para sistemas de hasta 15 kW, en principio. 
• Los maxímetros evitan los cortes en el suministro energético, aunque se sobrepase la potencia estipulada. Los ICP no, saltando en el momento en el que esto ocurre y cortando la corriente. 
• En el caso de los ICP, no hay ningún tipo de penalización en la factura de luz si se excede la potencia máxima contratada, ya que la luz se interrumpe. Con un maxímetro instalado, como esta no se corta, hay que pagar el sobrecoste en el momento en el que se facture. 
• El maxímetro es capaz de medir la potencia demandada por la instalación; el Interruptor de Control de Potencia, no. 

 

¿Qué potencia necesito contratar?

Si no dispones de un maxímetro para que calcule la energía que necesaria para tu negocio, tienes varias opciones.

Por una parte, puedes sumar las potencias de todos aquellos aparatos, sistemas y dispositivos que vayas a usar simultáneamente. La energía necesaria de cada uno suele venir especificada en su documentación, o bien en la página web del fabricante de los mismos. Tienes que tener en cuenta también los picos de potencia que se pueden experimentar en ciertos momentos, como por ejemplo cuando todos los empleados estén trabajando al mismo tiempo. 

Esto, sin embargo, puede ser algo complicado, especialmente en aquellos negocios de grandes dimensiones y con multitud de trabajadores. Si este es tu caso, lo mejor es que contrates un asesoramiento personalizado y profesional. Normalmente tu distribuidora puede llevar a cabo este estudio, para que te asegures al 100% de contratar solo y exclusivamente la potencia necesaria. 

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